Argentina cayó 1-0 ante Alemania tras una batalla épica que duró 120 minutos. Mario Götze, en la segunda parte de la prórroga, fue el autor de la única conquista en la tarde de Río de Janeiro.
Contrariamente a lo que muchos esperaban, el conjunto de Sabella salió a jugarle de igual a igual a un rival que llegaba como banca al partido. Lo tuvo Gonzalo Higuaín tras un error de Schweinsteiger pero el delantero no pudo definir bien ante el arquero alemán. El equipo europeo no podía encontrar el camino para llegar al área de Romero e, incluso, veía como una certera definición de Higuaín era anulada por un fuera de juego señalado de manera correcta.
Ya en el segundo tiempo el conjunto alemán empezó a mostrar mejor dominio de balón y mayor profundidad pero Argentina también tendría la suya. Quedará la duda eterna de lo que hubiera pasado si esa falta del arquero europeo sobre Higuaín era señalada como penal por el árbitro italiano. No sucedió y la definición se fue a tiempo suplementario.
En la primera mitad de la prórroga dividieron situaciones ya que Romero se la tapó a Schürrle en un arco y Palacio la perdió en el área alemana. Ya en la segunda etapa del suplementario la oportunidad le quedaría a Götze, que no perdonó. Faltaban algunos minutos, hubo un cabezazo de Messi que pasó cerca y la última, un tiro libre cerca del arco europeo. Messi agarró la responsabilidad pero su remate se fue muy por sobre el travesaño.
Y así llegó el pitazo final del italiano Nicola Rizzoli. La Copa del Mundo viajará en vuelo directo a Alemania, pero no queda más que agradecer a los jugadores y cuerpo técnico que representaron a nuestro país a lo largo de la competencia, por todo lo que dejaron y las jornadas épicas que le regalaron a un pueblo que los apoyó desde aquel ya lejano primer juego ante Bosnia.
Rodrigo Palacio ingresó a los 33 minutos del segundo tiempo en lugar de Gonzalo Higuaín y tuvo la chance más clara de Argentina en todo el tiempo suplementario. Fernando Gago entró por Enzo Pérez a los 41 minutos de la etapa complementaria y batalló ante el duro medio alemán durante más de media hora. Por su parte, Agustín Orión no ingresó.