Tras dos días libres, y con la mira puesta en el superclásico del 31 de mayo en México, Boca volvió al trabajo bajo techo, por las lluvias, y con 14 jugadores por ausencias y lesionados. El resto alternó entre el consultorio y el gimnasio.
Se terminó el torneo Final y, tras dos días de descanso, Boca volvió al trabajo para poner en marcha la preparación del último compromiso de la temporada, que será el 31 de mayo, en el mítico estadio Azteca de México, nada menos que ante River. Y en el reencuentro en La Boca Carlos Bianchi sólo pudo contar con 14 jugadores, descartando ausencias y lesionados.
El partido con Gimnasia dejó varios averiados. Entre ellos, Nicolás Colazo tendrá unos días de yeso en la mano izquierda por una fractura en el quinto metacarpiano y quedó descartado para el partido en México. Fede Bravo terminó con un fuerte traumatismo pero llegaría sin problemas. Y el tercer golpeado es Emanuel Trípodi, que finalizó con un esguince en la rodilla derecha.
El plantel, tras una entrada en calor, hizo una serie de ejercicios físicos con el Profe Alfano y luego se armaron tres equipos para un fútbol en espacios reducidos. Mientras, el resto del grupo alternó entre gimnasio y consultorio.